Un médico español vivió un desafortunado episodio en Santa Marta, que transformó sus vacaciones en una experiencia dolorosa y costosa. Javier Florez, originario de Bilbao, España, llegó a la ciudad atraído por sus playas y paisajes, pero su viaje tomó un giro inesperado tras ser víctima de un violento robo.
Florez había planeado visitar Playa Grande, un popular destino cercano a Taganga. Para disfrutar de la vista, optó por una caminata por un sendero en lugar de usar la lancha, pero pronto su excursión se tornó en un caos. Durante el trayecto, un delincuente armado con un machete lo abordó con la intención de robarle sus pertenencias, incluyendo dinero, celular y otros objetos.
El turista intentó escapar sin éxito y terminó siendo herido en el brazo y la pierna. A pesar de las lesiones, logró llegar a Taganga en busca de asistencia. El asaltante se llevó su cartera con efectivo y tarjetas de crédito.
La atención médica en la región también resultó ser un problema significativo. La comunidad local lo llevó al centro de salud más cercano, donde recibió primeros auxilios. Sin embargo, debido a la gravedad de las heridas, se le recomendó trasladarse al hospital departamental.
A pesar de que algunos residentes ayudaron con el transporte en taxi, Florez se encontró con otra dificultad cuando el hospital le exigió un anticipo de 528 mil pesos para poder atenderlo. Para cubrir esta suma, tuvo que solicitar ayuda a amigos en Colombia. Tras pagar el anticipo, fue admitido y se le indicó que necesitaba cirugía, con un costo adicional de 6 millones 700 mil pesos para cubrir el procedimiento y la hospitalización.
Florez también notó que los pagos se realizaron a través de cuentas personales en lugar de cuentas oficiales del hospital, lo cual le generó preocupación. A pesar de sus dudas, pagó por la urgencia de recibir atención médica.
Una vez estabilizado y dado de alta, Florez, desilusionado con la atención y los altos costos, decidió cancelar el resto de su viaje y regresar a España, dejando atrás una experiencia que no cumplió con sus expectativas.
La policía metropolitana de Santa Marta aún no se ha pronunciado sobre este caso rechazable. Trabajadores del sitio turístico exigen a la alcaldía de Santa Marta un plan de seguridad para los sitios turísticos y recalcaron que estos casos en años anteriores no se registraban.